Espionaje militar chileno en Perú

Aparentemente dos suboficiales de la marina de guerra peruana están involucrados en un escandaloso episodio de espionaje militar a favor de Chile que ya ha tenido repercusiones internacionales.
Y aunque el gobierno chileno ha tratado de safar cuerpo en este escándalo, Perú ha mandado una nota de protesta para que allá también se investigue este espionaje, y además la Cancillería ha llamado a nuestro embajador.
El caso más peligroso es el de Johnny Philco, un suboficial de inteligencia de la marina que viajó 11 veces al exterior entre Bolivia, Brasil, Argentina y Chile. Él trabajaba en el área telemática de la Zona naval 2 de la Comandancia General de Operaciones del Pacífico. Esta comandancia tiene como misión efectuar el planeamiento estratégico operativo, preparar, conducir y evaluar las operaciones y actividades logísticas de los Comandos Operativos y las zonas navales. Es decir, Philco tenía acceso a información altamente sensible. Aparentemente, él fue captado en el 2006, y a la vez fue el primero en ser detenido en agosto del año pasado. Según fuentes de la Marina, en su primer interrogatorio registrado en un video él confesó haber espiado para Chile, y que se reunió en Argentina con un oficial y un suboficial del Ejército mapuche. Ambos militares han sido identificados y se ha obtenido documentación que prueba que ellos permanecieron en Argentina durante los mismos días que estuvo Philco allí. Aunque después, al verse acorralado, se retractó. Él tiene conocimientos de encriptación de documentos que podría haber utilizado para facilitar información a Chile.

¿Qué dijo el espía Alberto Domínguez?

¿Qué puede motivar a un marino peruano para que se convierta en un espía militar de Chile? ¿Es el dinero, la codicia o la falta de amor a su institución? Ayer, el diario La República publicó la declaración del suboficial Alfredo Marino Domínguez Raffo en la que cuenta todos los motivos por los que entregó información a extranjeros, cuánto dinero recibió y cómo fueron sus reuniones en Brasil.
La versión que el suboficial Alfredo Domínguez dio ante el fiscal militar Martin Lupérdiga Mendoza es increíble. Lo que ha intentado es librarse de toda responsabilidad que lo involucre en un espionaje militar y sólo hacerlo pasar como si hubiese estado haciendo trabajos para una empresa internacional.

Violencia en Pichanaki por lío sobre Pluspetrol

Dos camioncitos repletos de gente acompañaron su carrosa fúnebre. Ever Pérez Huamán fue enterrado el viernes 13 entre una multitud de personas que aún no entendían lo que acaba de pasar en Pichanaki. En el sepelio no hubo ministros, representantes del Ejecutivo ni dirigentes enardecidos.
Ever Pérez era un estudiante de 25 años que cursaba sus últimos ciclos de contabilidad en la Uladech. Su mamá falleció un año atrás y el pasado martes 10 de febrero a él le cayeron dos balazos de la policía en medio de los enfrentamientos de Pichanaki.
Una bala lo traspasó y la otra se quedó alojada en su abdomen. Perdió 4 litros de sangre y sufrió un shock hipovolémico. Su muerte no fue heroica, sino desgarradora.

Roban combustible en base aérea FAP de Pisco

Esta es una escandalosa historia que involucra a personal de la Fuerza Aérea en Pisco.
La información nos llegó a través de oficiales que estaban descontentos con la dejadez con la que se atendió esta denuncia al interior de la base el año pasado. Nos entregaron documentos y audios de una historia que demuestran que desde julio del 2014 mensualmente han ingresado camiones para robar combustible. Los suboficiales Eduardo Ramos Cárdenas y Javier Ñañez Valladares presentaron dos informes en los que dan cuenta de un hecho sin precedentes: una cisterna aprovechó la noche para ingresar por la parte trasera de la base aérea de Pisco para sustraer combustible de avión que la FAP recibe de Petroperú y almacena en estos tanques elevados. El combustible que estarían robando es de tipo Turbo JET A1, utilizado para el vuelo de los aviones.
¿Por qué estarían robando querosene? Según las sospechas de los denunciantes, los caminos pueden ser básicamente dos: o para la producción de droga o para vuelos ilegales.

La segunda caída de Pocho Alarcón

Atrás quedaron sus años mozos en la dirigencia del club de sus amores. Todo lo que queda de él ahora es la imagen de esta mesa en la que él, los hermanos Orellana Rengifo y los dueños de Oncoserv se reparten el botín de 7 millones de soles que le arrancaron mediante un cuestionadísimo arbitraje al Gobierno Regional de Arequipa.
Guillermo «Pocho» Alarcón se salió de las canchas para entrar a un terreno peligroso. A fines del 2006 el expresidente Regional de Arequipa Daniel Vera Ballón firmó un contrato con la empresa Oncoserv a días de dejar el sillón municipal. La empresa tenía que invertir 2,8 millones de soles en equipos para el tratamiento de cáncer y el gobierno le iba a garantizar que todititos los enfermos se iban a tratar ahí. El contrato se retrasó, y la empresa nunca cumplió su compromiso. Ni siquiera llegó a comprar toda la maquinaria que necesitaba y el Gobierno Regional canceló el contrato. Alarcón, de acuerdo a las investigaciones, fue el que acercó a los propietarios de Oncoserv, los esposos Eddy Manfreda y Victoria Infantas, al clan de Rodolfo Orellana para planear el fraudulento arbitraje con el que intentarían arrancharle 44 millones de soles al Gobierno Regional de Arequipa.

Violencia contra niño en San Isidro

El Poder Judicial ya ha dicho que Luis Alfonso Tasaico va a pasar los próximos 9 meses encerrado para ser procesado por el presunto abuso físico contra el hijo de su novia. ¿Pero qué cosas son ciertas para justificar su encierro y qué pruebas se han presentado en la audiencia? Todo indicaría que se trata de una decisión del Poder Judicial para hacernos creer que acá la justicia -aunque sea en este tipo de casos- funciona.
A Tasaico lo acusan de agredir brutalmente a un niño hasta hacerlo sangrar y lo procesan por el delito de lesiones leves. Lo primero que todos vimos el lunes fue este video grabado por Romy Schroth que al ver el incidente, lo primero que hizo fue registrarlo y denunciarlo.
Lo que en este video se ve es que el niño sangra por la nariz y está sentado en el asiento trasero del carro, mientras Luis Alfonso Tasaico se mantiene inexpresivo pese a los reclamos que todos los que están a su alrededor le hacen por su conducta. Pero lo que no se ve es qué ocasionó que el niño sangre.